Es finales del siglo XIX y más de nueve mil molinos de viento decoran el paisaje de los Países Bajos, algunos de ellos diseñados específicamente para drenar las tierras bajas, llamadas pólderes. En los pólderes, entre estos molinos de viento, hay campos llenos de coloridos tulipanes, la flor que alguna vez fue parte de la tumultuosa historia de la primera burbuja financiera, pero que ahora es simplemente una parte esencial del paisaje neerlandés, especialmente en la famosa ruta de las flores.
En "El valle de los molinos", un juego inspirado en la ruta de las flores, los jugadores asumís el papel de cultivadores y empresarios de tulipanes. Construiréis y mejoraréis vuestros molinos de viento, buscaréis nuevos bulbos de tulipanes en intercambios extranjeros o entre vendedores locales para comprar y plantar, y trataréis de obtener ventajas con la ayuda de empleados y contratos lucrativos. ¡Deja que tus campos florecientes pongan verdes de envidia a tus competidores!
Durante su turno, los jugadores eligen la acción al girar las ruedas de su tablero de molino de viento. Durante la partida, pueden: mejorar sus ruedas, agregando mejoras, para construir su motor; plantar tulipanes en sus campos, que puntuarán al final del juego; construir molinos de viento en el tablero principal para activar recompensas de campos adyacentes; contratar ayudantes, que brinden bonificaciones para ciertas acciones; obtener contratos para puntuación al final de la partida; visitar el mercado local y realizar un comercio extranjero.
En resumen, "El valle de los molinos" es un juego de mesa ligero con turnos rápidos, un mecanismo inteligente de selección de acciones, múltiples opciones para construir tu motor y un entorno encantador.
2024
Bonus de fin de partida | Cartas multiuso | Configuración variable | Habilidades variables | Mercado | Rondel | Solitario | Unión de puntos de un mapa
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A finales del siglo XIX, más de nueve mil molinos de viento pueblan las áreas rurales de los Países Bajos, algunos de ellos construidos expresamente para secar las tierras bajas, llamadas pólderes. En los pólderes, entre estos molinos de viento, se extienden campos sembrados de coloridos tulipanes: la flor que una vez estuvo inmersa en la turbulenta historia de la primera burbuja financiera.