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¿Puedes hacer florecer campos de cartas de un solo color respetando los límites numéricos? Este juego de mesa consiste en un mazo de ciento ocho cartas, con cartas de cuatro colores y valores del uno al cuatro.

Cada jugador comienza con una carta aleatoria en su área de juego, y las cartas restantes se dividen en pilas: una bocabajo y las demás con la carta superior bocarriba.

En cada turno, roba una carta de la parte superior de cualquier pila y colócala adyacente a una carta ya existente en tu campo o encima de una carta en tu campo. Si tomas una carta bocarriba, voltea la siguiente carta de esa pila bocarriba. Cuando un jugador toma la última carta de una pila, la coloca y la partida termina.

Al final del juego: cada cuatro en tu campo debe formar parte de un grupo de exactamente cuatro cuatros; y lo mismo aplica para cada tres y cada dos. Cada uno no debe estar adyacente a otro uno. Las cartas que violen estas reglas son eliminadas de tu campo (incluyendo cualquier carta cubierta), y pierdes un punto por cada carta eliminada.

Luego, por cada grupo de cartas del mismo color en tu campo que contenga al menos cinco cartas adyacentes, ganas un punto por cada una de esas cartas. Finalmente, si una carta con una mariposa está adyacente a una carta del mismo color que la mariposa, ganas un punto por esa carta. ¡El jugador con más puntos gana la partida!