La inspiración para crear este juego de mesa surge de las grandes torres medievales de San Gimignano, construidas en la región de Toscana en Italia. Actualmente conocido como "el Manhattan de la Edad Media", San Gimignano fue hogar de 72 grandes torres durante los siglos XII y XIII, de las cuales sólo quince han llegado hasta nuestros días.
Estas torres se construyeron originalmente para ofrecer a las familias poderosas protección de bandas de malhechores, así como de otras familias rivales. Sin embargo, con el tiempo las torres se convirtieron en símbolos de status, prestigio y poder, hasta el punto de que llegó a prohibirse la construcción de torres de más altura que el Ayuntamiento.
1993