Os hemos avisado en los últimos directos que íbamos a traer la reseñita; no del juego base (que ya la tenéis), en este caso vamos a hablar de la expansión que también (y con más razón) se va a llevar el sello de juegazo a dos, y ahora entenderéis por qué. No tiene caja porque viene en un plastiquito (un sobrecito tipo blíster) y no está, obviamente.
Los jugadores deberán sincronizar sus mentes para ordenar de manera ascendente y descendente una serie de cartas, cumpliendo niveles de dificultad. No hay orden de turno y los jugadores no pueden hablar, ni hacer señas, ni indicar de ninguna manera qué cartas tienen. ¿Qué? ¿Cómo? Os lo contamos ahora mismo. ¡Usad vuestros poderes mentales para pasaros la información!
Venimos a hablaros de este juego. Información del juego: son tres horas cada misión, porque en este caso vamos a tener tres divididas. ¿Qué más podemos decir? ¿Qué vamos a hacer? Pues hablar un poquito de este juego, sin spoilers: obviamente, fuera spoilers. No hemos hecho escaleta pero vamos a intentar ir por puntos, ser lo más concisos posible.
Os traemos... ¿un nuevo clásico? No sé cómo definirlo, pero ahora lo veréis. Vamos a hablaros de este juego. ¿Qué te parece este juego? Pues me parece un juego que si lo juego por sí mismo, a dos me parece que funciona perfecto, escala muy bien. Es un juego abstracto donde necesitas planificar bien tus movimientos, tomar buenas decisiones,...
Es momento de unir nuestras mentes y prepararnos para un juego cooperativo donde conectaremos con nuestros compañeros para superar todos los niveles. Estamos hablando de un filler cooperativo nominado a mejor juego del año. El objetivo es conseguir ordenar una serie de cartas numeradas del uno al cien, superando diferentes niveles.
Un juego de habilidad tan sencillo y simple como una carrera de pingüinos, pero dinñamico y vistoso; y que seguro enganchará rápidamente a toda la familia. Pero, ¿de qué va este juego? Tal como indica el nombre, nos encontramos en una escuela en la que deberemos recolectar pescados mediante nuestra destreza con los dedos, evitando además la persecución del vigilante.
A nivel componentes, nos encontramos con una caja con una ilustración que, a mí personalmente, me parece bastante bonito; sobretodo teniendo en cuenta la época que era. Es una portada que a día de hoy quizá sí podría verse un poco antigua; pero en principio tampoco tan desplazada. (estamos hablando de un juego de los noventa).
Un juego de corta duración que se sirve de unas pocas cartas para crear una mecánica de mayorías. Dos jugadores compiten para obtener el favor de siete ilustres geishas, coleccionando cada uno de sus respectivos objetos favoritos para actuar. Con algo de cautela y astucia, así como mediante algunas jugadas más arriesgadas, ¿serás capaz de superar a tu contrincante y obtener el favor de más geishas?
Para preparar una partida, colocaremos los tres tableros por separado. Ordenaremos las cartas de paso (verde, amarillo y rojo). Barajaremos las cartas de Robinson y las colocaremos en su tablero correspondiente. Haremos lo mismo con las cartas de peligro, y por último elegiremos dos cartas de pirata al azar y colocaremos los marcadores de vida a un lado, separando dos de ellos.
Para endulzarnos un poco la vida no hay nada mejor que un juego de mesa, pero... ¿y si le añadimos repostería? Esta fantástica y deliciosa mezcla se presenta en este juego. Con solo un primer vistazo querremos devorar sus cartas y meeples pasteleros, personalizados botes de mermelada bonitos y de buena calidad. Un juego para jugar en familia y demostrar, ¡quién es el mejor pastelero!
Cada jugador representa a una nación en la primera exposición universal de 1851 celebrada en Londres. Con el fin de asegurarte de que tu patria atrae la atención de todo el mundo, exhibirás inventos espectaculares y reclutarás a las mentes más brillantes e influyentes de tu tiempo. Moverás los hilos por doquier para preparar el evento de la mejor manera posible.
Aquí tenemos el juego que, la verdad, hay que decir a su favor que tiene el mismo tamaño que el resto de la saga. En cuanto a la caja, habrá gente a la que le guste, habrá gente a la que no,... a mí no es de las que me vuelvan loco porque, quizás también la temática o la ambientación no es una cosa que me llame mucho la atención: el mundo moderno no me pirra para jugar dentro de él.
Os voy a explicar cómo se juega y por qué se lleva nuestro sello. Vamos a verlo. En este juego, cada jugador va a representar una nación diferente en la primera exposición universal de 1851; y todo sería diferente si cada nación hubiese aportado contenido ilimitado para dicha exposición... pero no es así. Así que tendremos que buscárnoslas para que nuestra exposición sea la mejor.
Pondremos a prueba nuestro destino usando la fuerza de los elementos, a través de tiradas de dados. Para preparar una partida, se coloca el caldero (que es la caja) en el centro de la mesa, y cada jugador recibe un número de dados dependiendo del número de jugadores. Se lanza un dado al caldero y se deja ahí por el lado que haya salido (siempre que no sea en negro), y estamos listos para jugar.
¿A quién no le apetece de vez en cuando vivir una experiencia diferente? Para quien no haya oído hablar nunca, se trata de una de las sagas más premiadas de escape rooms llevadas a un juego de mesa. Como lo estáis leyendo, los escape rooms están triunfando a día de hoy no sólo en salas de escapismo que encontramos con facilidad por todo el país.
Los habitantes de la gran meseta en medio de los Andes, necesitan nuestra ayuda para obtener el máximo de recursos posibles. Tendremos que pescar en el lago Titicaca, extraer minerales de las montañas, criar Alpacas y muchas otras acciones para prosperar debidamente. Es un juego de gestión de recursos y bag-building hecho expresamente para personas muy estratégicas.
Como seguro que habéis visto en otros análisis que hemos hecho aquí, muy profesionalmente, pues me he traído a la mejor compañía. Lo primero que vamos a hacer es recordar que vamos a verter una serie de opiniones sobre el juego, que no dejan de ser las nuestras: nuestra percepción que hemos tenido de este juego después de haberlo jugado.
La caja os gustará más u os gustará menos, pero para un juego de tipo party (que viene a ser lo que es esto) pues está bastante bien: es un juego que el acabado está bien. Debo deciros que tiene los uñeros (que es esto para empujar un poco la tapa de la caja), me parecen una tontería. Los cartones son muy buenos, son muy resistentes.
Un juego en el que podremos ser desde mafioso, ladrón, tripular un submarino e incluso ser el minotauro del rey Minos. ¿Funciona a dos? ¿Habrá gustado en casa? Todo esto y mucho más (como siempre...), ¡en el vídeo! Es parecido a todo este tipo de juegos asiméticos en el que uno es el que tiene que huir y los otros son los que tienen que encontrarle.
Una reciente incorporación a la colección de juegos: un "roll and write" muy completo. Desconozco el juego original del que se ha implementado, pero después de un par de partidas me gustaría al menos conocer la versión de cartas. Para el centro de la mesa un tablero común donde se situarán los dados del juego. El jugador activo lanzará los dados.
Cada carta de vagón de tren tiene un número y una habilidad. Depende de donde se robe la carta se hará uso del número o de la habilidad. Podremos beneficiarnos de esas habilidades y al mismo tiempo perjudicar a los demás jugadores y dificultar así su partida. El primer jugador que ordene los vagones de forma ascendente será el ganador de la partida.
La preparación es muy sencilla: le daremos dos hojas a cada jugador, para que jueguen con la parte trasera y delantera (aunque quien ya tenga maña y experiencia podría jugar sólo con una, dándole la vuelta)... En un principio, dos hojitas, algo para escribir y colocamos el despliegue: vamos a hacer tres montones barajados en esta posición.
Antes de empezar con la reseña me gustaría aclarar que no soy un jugador experto en solitarios ni juegos de deducción. Valoro estos juegos desde el punto de vista de la experiencia que me dan y lo satisfactorio que es el puzzle o la historia. Así que cambiaré valores de puntuación que uso en los juegos competitivos. Creo que este no será el último juego solitario y/o cooperativo que traiga a la web para reseñar.
Los jugadores competirán por ser los más ricos e influyentes habitantes del salvaje oeste. Un tablero muy bonito, una bolsa de tela, cubitos amarillos, grises y rojos, muchos meeples personalizados, toldos, dados, lingotes de oro e indicadores de duelo. Todo en una pequeña caja muy portable. El juego consiste en ser el tío más duro del salvaje oeste.