Es un juego de gestión de recursos en el que deberás gestionar tus instalaciones para cosechar, criar animales y producir bienes para satisfacer la demanda de los pueblos más cercanos. Es una opción perfecta para quienes buscan un juego de mesa exigente, de gestión de recursos, optimizado para dos jugadores. Con una profundidad y extensión adecuadas.
Es un juego de dados, en el cual en nuestro turno deberemos tentar al a suerte para poder obtener la mayor cantidad de tesoros posibles. Esto se consigue con grupos de símbolos iguales en los dados. Cuántos más símbolos más puntos conseguiremos, además de puntuar otras cosas como oro y diamantes. Pero no todo es bueno, ya que tendremos que tener mucho cuidado con las calaveras.
La preparación de la partida es muy sencilla. Se baraja el mazo de cartas de estanque y se reparten dos a cada jugador, se elige un jugador al azar y se coloca el resto de cartas a un lado, junto con los dados. La ronda de juego si divide en dos fases. La ronda termina cuando se ha colocado el número exacto de carpas en el estanque y éste está cerrado.
Es un juego que pudimos probar en su versión prototipo. Luego os contamos un poquito nuestra opinión. Así que vamos a pasar a ver cómo se juega. Básicamente, vamos a ir a explorar la pirámide de Gizeh y queremos ver los tesoros que se esconden en su interior. Esta es una partida... pues da igual para el número de jugadores porque siempre se va a preparar de la misma forma.
Un juego que pone en la caja de tres a cinco jugadores, pero es mentira: ahora os explicaremos por qué. ¿Por qué hemos dicho que es mentira de tres a cinco? Pues porque tiene una versión a dos, que no está en las reglas pero que os vamos a explicar cómo se juega. Porque el autor, tras la publicación del juego, las subió y las podéis encontrar.
Es un juego básico, de colocación de trabajadores, como le gusta hacer a este diseñador. En este caso, cada jugador tendrá cuatro trabajadores y tendrá que intentar avanzar durante siete rondas lo máximo posible en un track de turismo. Este track de turismo exigirá a los jugadores que entreguen una cierta cantidad de vegetales.
La idea del juego es que tenemos que montar nuestro festival para ser el festival más chulo. Vamos a tener los visitantes, que vamos a intentar hacerles sitio para que entren todos. ¡Y ya está! Así que lo que vamos a hacer es enseñaros a jugar y luego, como siempre, daremos nuestra opinión. Aquí tenemos una patida preparada.
No hay nada que hacer, el rey está muerto. Venga gana influencia, respeto y hazte con el reino, pero debes ser elegido por las cinco facciones de este reino de fantasía. ¿Qué facciones existen en este juego? Goblins, enanos, no muertos, doppelgängers y caballeros. Para preparar una partida, baraja todas las cartas y crea un mazo bocabajo en el centro de la mesa.
Vamos a continuar con las reseñas de juegos del diseñador alemán Uwe Rosenberg. Fue un juego que fue diseñado exclusivamente para dos jugadores. Vamos a hablar un poquito mecánicamente cómo funciona. Es un juego básico de colocación de trabajadores en el que las acciones se dividen en rondas de verano y rondas de invierno.
Deberemos intentar que un simpático bandido no consiga salir de la prisión otra vez... Estamos frente a un juego sencillísimo, que podéis jugar con los pequelúdicos y que podéis llevarlo a cualquier sitio. Para jugar tienes que barajar todas las cartas dejando en el centro de la mesa la ficha inicial de bandido. Cada jugador roba tres cartas y a empezar a jugar.
Un juego familiar idea para iniciarse en los juegos de mesa. De mecánicas sencillas donde deberás explorar territorio, y recolectar recursos para cumplir determinados requisitos. Como siempre, vamos a explicaros cómo se juega, algunos turnos de ejemplo y os contamos qué tal nos parece este juego a dos y su público objetivo. Así que vamos a la cámara de arriba.
Nos pone en la piel de un grupo de ladrones de guante blanco que van a una gran ciudad de Europa a hacer un robo a gran escala en tres localizaciones de forma simultánea. La cantidad de iconos hace que tengamos que jugar varias partidas para acostumbrarnos. Esto es un problema que se arregla con rejugabilidad, así que debemos estar preparados para una primera experiencia menos fluida de lo que es el juego en realidad.
Es un filler de cartas muy sencillo de jugar, en el que el objetivo es fastidiar a los rivales para que acumulen más pecados que uno y así ganar la partida. Esto lo haremos con una mecánica de cartas muy simple y ayudándonos de las cartas de ángel/demonio, para que nos beneficien. Destacar sobre todo el arte gráfico, con guiños hacia el mundo lúdico y unas ilustraciones geniales.
Es un juego en el cual deberemos optimizar siete cartas, en las cuales combinarás habilidades y efectos para obtener la mayor cantidad de puntos posibles. Las cartas se dividen en diez palos que se identifican por el color del borde de las mismas y otras tres cartas sin palo. Además, todas las cartas del juego son diferentes.
Tendrás que completar los contratos antes que nadie para llevarte los puntos de recompensa. Pero no puedes descuidar la construcción de los edificios o el avance de tu hombrecito para obtener recompensas adicionales. Aquí os contamos cómo se juega, de qué va y qué tal funciona a dos este nuevo juego de mesa muy fácil de sacar y que cabe en una mochila.
En su turno, cada jugador jugará una carta de movimiento y moverá un barco de la forma que indique dicha carta. Si no puede jugar ninguna carta, descartará las cartas de restricciones y girará una de sus fichas de ancla. Finalmente el jugador robará cartas hasta tener cinco (más una por cada ancla volteada). Algunas cartas muestran restricciones.
El juego se desarrolla por turnos. Cada jugador tiene dos o tres cartas en la mano dependiendo del número de jugadores y con ellas tendrá que jugar. ¿Cómo? Pues muy sencillo. En cada turno debe deshacerse de una de las cartas y robar otra del mazo. En todo momento puedes interaccionar con los demás jugadores con tus teorías, comentarios o bien dando pistas sobre las cartas que tienes en la mano.
Os voy a explicar un poquito sobre este juego. Como véis, ésta es la preparación de la partida; la verdad es que con la propia caja podríamos casi hacer la preparación, salvo estos tableritos. En este caso que seríamos tres jugadores, la loseta de mercado no estaría disponible. Vamos a sacar los dos insertos que vienen tal cual en el juego.
El objetivo es conseguir la mayor cantidad de puntos combinando cartas. Las cogeremos del mercado y las agruparemos en combinaciones numéricas o diferentes motivos que presentan las cartas. ¿Y cómo se puntúa? Pues puntuarás por diferentes estilos y combinaciones. Este juego entra por los ojos desde el primer momento que lo tienes en las manos.
Para que sepáis un poquito cómo funciona, es un juego en el que durante nueve rondas, los jugadores irán adquiriendo una serie de campos que tendrán que cultivarlos añadiendo hortalizas (el juego trae muchas hortalizas distintas: trigo, puerros, judías, calabazas, nabos y hay otra más... rábanos, creo que son) y con ellas lo que tenemos que hacer es sembrarlas.
El primer título de corte infantil de la serie, manteniendo su mecánica original pero dando un toque más infantil eliminando los puntos negativos por jugar determinadas cartas. Como es habitual, dejaremos la primera carta sobre la mesa y repartiremos tres a cada jugador. Estas cartas permancerán en secreto y sólo se podrá informar de las partes destacadas de cada carta.
Para preparar una partida, colocaremos el tablero en el centro de la mesa y pondremos tres ladrones por jugador en el bosque. Barajaremos las losetas de poder y las colocaremos en grupos de tres en su lugar en el tablero, y voltearemos la primera de cada montón. Cada jugador recibirá un tablero, un marcador de puntos y tres fichas de ladrón.
Hubo una vez un tiempo lleno de guerras heroicas implacables y criaturas fantásticas. Los reinos de papel son la última reliquia que queda de esos siglos olvidados. ¡Ha llegado el momento de volver a abrir este libro y de revivir estas épocas legendarias! Tu objetivo en este juego es desarrollar tu reino desplegando unidades y construyendo edificios.
Es un juego de gestión de recursos que continúa con la mecánica que utiliza mucho Uwe Rosenberg en sus juegos como es la colocación de trabajadores, aunque en este caso los jugadores dispondremos de un único trabajador durante la partida. Los jugadores iremos jugando unos turnos con unas rondas bastante específicas que tienen siete turnos exactamente.