Creo que el juego base hubiera estado mejor con un jugador más, de modo que me tuve que hacer yo mismo unos meeples de corcho. Yo como mucho lo veo un juego para seis porque a ocho se te hace interminable el entreturno. Hay juegos en los que es cierto que te entretienes viendo lo que hacen los demás jugadores, pero este no es precisamente uno de esos.
A mí una de las cosas que más me asustan de expansionar un juego y sobre todo un juego como este en el que parte de la chicha está en no saber lo que estás cogiendo, es justamente que a menudo las diferentes expansiones de un mismo producto no tienen la misma tonalidad. Otro punto a favor que se lleva esta recopilación porque al estar creada a la vez, el conjunto es totalmente idéntico.
Esta versión trae los tres juegos que sacaron y está bastante bien porque he visto las cajas de aquellas versiones y eran tan grandes como esta. No es mal juego, pero personalmente no creo que durase mucho en mi ludoteca si tuviera las versiones separadas. Más que nada porque ocuparía demasiado espacio para lo que luego el juego es.
Tendrás que prepararte formando ejércitos, construyendo máquinas de asedio, estudiando mejoras en la academia o explorando mazmorras en busca de recursos. Promete ser un juego rápido y divertido, con reglas sencillas e interacción en estado puro. Nosotros vamos a apoyar el juego así que ya os contaremos que nos ha parecido cuando nos llegue a casa.
Un muy buen juego ya desde su juego base, pero personalmente creo que si se quiere tener el juego con alguna expansión extra que le pueda dar variabilidad a las partidas entonces esta es la mejor opción. Sólo si no tenemos decidido ya de ante mano que queremos ciertas expansiones en concreto (aunque a lo mejor tienes suerte y son justo las que vienen aquí).
Somos los alcaldes de una prometedora ciudad, encargando a nuestros arquitectos la dura tarea de diseñar y levantar la metrópolis más próspera de todas. Aunque tiene un modo clásico y otro experto, con algunas diferencias, la base de la mecánica es seleccionar, con nuestros arquitectos, una loseta (edificio) de entre las que forman una rejilla cinco por cinco y colocarla.
La realidad es que nunca me había planteado pillar ningún juego ambientado en ninguna película, libro o serie que pudiera haberme gustado. Supongo que porque en parte pensaba que no iban a dejarme el mismo sabor de boca. Creo que el primer juego que me pillé en ese sentido y realmente sentí estar viviendo en el mundillo, fue el de "Juego de Tronos: El Juego de Tablero".
¿Qué tal resulta este juego? La verdad es que es un juego precioso. Sobre todo teniendo en cuenta de que estamos hablando de una editorial que juraría que nunca se ha dedicado a hacer juegos de mesa. Al menos yo la recuerdo como una casa de puzzles para críos y ese tipo cosas. El juego nos llega en una señora caja con un arte muy llamativo.
Los jugadores son buscadores de oro, buscando fortuna en el salvaje oeste. En cada turno se subastan concesiones mineras (asociadas a cinco ciudades diferentes). Los jugadores podrán poco a poco convertirse en alcaldes de esas ciudades, también en propietarios de bares, salteadores de caminos,... Al final de la partida, el jugador con mayor influencia, las mejores minas y con más dinero gana.
Hace ya varios días de la muerte del rey, sin embargo todavía no se ha encontrado el tesoro del difunto. Todos, incluido tú, quieren salir con el tesoro, pero también interesa ser el último en morir. Se pone un personaje en cada loseta y se le dan dos fichas de personaje a cada jugador (nadie sabe quién eres). En tu turno puedes matar o mover.
Si nos juntamos entre dos y ocho personas ya podemos jugar. Sólo tenemos que repartir las cartas entre todos, eso sí, boca abajo para no saber qué va a salir y comenzar a sacar moscas a volar. En el momento que sale un matamoscas tendremos que ser el más rápido en cazar, poniendo la mano sobre la que nos queremos llevar.
Representamos a una tribu de piojos jugueteando en el pelo de Pualani. No se nos ha ocurrido otra cosa que ponernos a jugar al juego de la cuerda con los pelos de la pobre niña. Ganarás la partida si consigues demostrar más fuerza que tus oponentes, pero ojo, deberás calcular bien tu fuerza porque si rompes el pelo perderás los puntos.
La idea era muy buena y sonaba aún mejor, aunque es verdad que como juego estaba quizás poco trabajado en el sentido de que el punto fuerte era tan solo el puente. Por desgracia la parte que se refiere al río... hacía un poco de agua y nunca mejor dicho. El caso es que todo el juego se limitaba a un tirar dados para avanzar lo máximo posible.
Un grupo de aprendices de mago intenta encontrar los símbolos mágicos que están escondidos en el laberinto mágico. Pero... los magos veteranos no se lo van a poner fácil y encantan el laberinto . ¡Ahora los muros son invisibles! Cada jugador empieza en una esquina del tablero y se saca un símbolo mágico de la bolsa y se coloca sobre su dibujo equivalente en el tablero.
Nos encontramos en una escuela de magia. En la clase de pociones, nuestro objetivo no es sólo completar el mayor número de pociones posible, sino también saber utilizarlas sabiamente para nuestro objetivo real que es ganar puntos de victoria, pues todos sabemos que lo que más les importa a los magos son los puntos de victoria.
Las mecánicas se parecen a las de otros juegos por aquello de andar muy centradas en las cartas. De hecho, si no fuera por el plástico, sería justamente eso: un juego de cartas. Mola porque según qué y cuánto construyas vas a ganar cierto dinero, pero aún me gusta más la posibilidad de conseguir puntos negativos que al final de la partida serán los que te manden (o no) a los cocodrilos del Nilo.
Hoy os traemos este juego. Vamos a ver cómo se juega. Al abrir la caja, lo primero que nos encontramos es el tablero. Es un juego de puzles que contiene trece fichas y que no hay ninguna igual: de sus trece fichas, ninguna de las trece son iguales. Aparte de esto tenemos las modalidades de juego (que hay doce) y las instrucciones.
Nos encontramos haciendo cola para entrar en el bar de moda de la ciudad. El caso es que las puertas sólo se abren cuando se llena la cola y sólo para que entren un par de animales, el último será expulsado de una patada al callejón de detrás del bar y el resto podrán seguir esperando pacientemente. Un juego divertido, loco, en el que nada te sale como esperabas.
Dirige a tu equipo de exploradores a través de la selva de la isla de Karuba en busca de los templos. Para ello tendrás que encontrar los caminos escondidos entre la vegetación, pero ve con cuidado pues podrás encontrar diamantes y pepitas de oro esparcidas entre la maleza. A lo largo de la partida tenemos que construir caminos que atravesando la jungla unan cada explorador con el templo de su color.
Chavalería, hoy os enseño a jugar a un juego, un city building de dos a cuatro jugadores de François Gandon y editado por Days of Wonder (distribuido en España por Edge). ¿Queréis convertiros en el próximo especulador urbanístico de la ciudad y llegar a ser su alcalde?
Hoy vamos a hablar de este juego. Vamos a ver el contenido de la caja. Nos vienen las instrucciones en varios idiomas. Nos vienen las fichas, que tienen forma de conejo... la baraja, que es una baraja más grande de lo normal... y las puntuaciones dependiendo del color. Como tablero vamos a usar la misma caja.
¿Materiales? Las bolas de metal... pues eso, son de metal e ignoro cómo serán éstas, pero recuerdo haber tenido de pequeño juegos con ese tipo de bolas y creo que no se salvó ni una de ser marcada por el óxido. ¿Cosa de mi casa o de la aleación? El plástico no está mal, salvo por el disparador del X-Wing que a mí no me inspira confianza (recordemos que es para críos y no adultos).
Somos los hechiceros más importantes del reino de Xidit, compitiendo en un torneo de magia por alcanzar la victoria que nos reconozca como el mejor hechicero del reino. De dos a cuatro hechiceros, a partir de doce años, y escala muy bien: algunas cartas son más potentes cuantos más jugadores haya, con lo que aumentan las opciones de "cartas buenas".
Hoy traemos un juego que, como su nombre indica, es una línea del tiempo. Lo traemos multitemático, el cual mezcla todos los temas. Vamos a abrir la lata. Tenemos las instrucciones y la baraja divivida en dos. El juego consiste en quedarse sin cartas haciendo una línea de tiempo con tus cartas.