Y ahora que ya me he quitado de encima las referencias a Chiquito de la Calzada, puedo comenzar la reseña. Este juego es la última apuesta de la editorial, que ya se nos había estrenado con "Virus!" y nos dio una alegría con una edición requetechula de uno de mis juegos de destreza favoritos, "Mondrian". Esta vez han decidido apostar por un juego para dos jugadores.
Hola, buenas. Aquí estamos en D.a.Dos. con el setup, hay que distribuirlo como una partida a dos jugadores. Cosas a tener en cuenta de lo básico del setup... si ya habéis jugado a este juego no os sonará nada raro e intentaremos explicarlo lo más breve; pero que si no lo habéis jugado lo podáis entender. Lo primero que haremos será colocar las cartas de encuentro barajadas.
No sé vosotros, pero yo no había siquiera oído hablar de este juego hasta que lo vi plantado sobre una mesa. ¿Y de qué va esto? Pues tenemos unos elefantes y vamos poniendo losetas, y mueves el elefante a la loseta. Vale, hasta luego. Que ya hemos visto "Gardens", "Cacao" y demás fauna. Y este sería el fin, pero es que lo vi en otra mesa. Y en otra.
Hoy os venimos a hablar de un juego cooperativo como poquitos hay. Nos vamos a aventurar a construir un barco volador para salir de ahí. Ese es el motivo de la aventura: tenemos un extraño artefacto volador pero está incompleto. Necesitamos hélices, una brújula... ya sabéis: lo que hace que un barco vuele. Y las piezas están diseminadas por un desierto.
Hoy os venimos a hablar de un juego de gestión, de esos que molan. Hoy estamos en el farragoso territorio de los eurogames. Como su propio nombre indica, son juegos que están diseñados en Europa. Pero realmente tienen unas características clave que los identifican ante todos como los típicos juegos peñazo.
Comprar un juego de esta editorial es ir a tiro hecho: sabes que vas a verte las caras con un juego familiar de reglas sencillas y componentes de calidad. También es de agradecer saber que es una editorial que no cree sacar juegos como si fueran churros: un juego, algo para "¡Aventureros al tren!" y ya tenemos la planificación anual.
Hoy os traemos una cosa cuca y pequeñita, porque normalmente tenemos la mesa llena con grandes muestras de poderío, figuras, cajas, muchos componentes,... y hoy estamos en el opuesto, en esa teoría de menos es más. El juego que os traemos hoy se titula de la manera que han encontrado de traducir "Tiny Epic Kingdoms".
¿Qué tal? He decidido que voy a probar al automa, a ver qué tal funciona. No había jugado antes a ningún otro automa de esta editorial. Lo primero que nos dice el manual es que hay que hacer el montaje habitual. He puesto ya los visitantes de verano, voy a poner las vides y el mazo de visitantes de invierno.
Me he decidido a escribir este post y explicaros por qué para mí es uno de los mejores "deckbuildings" competitivos. Y sí, hago el matiz de competitivo, porque desde que descubrí "Legendary Encounters: An Alien Deck Building Game", en el terreno de los cooperativos, éste no tiene rival (al menos de los que yo he probado).
A lo largo de la partida ampliarás tus dominios solapando cartas que previamente tendrás que adquirir en una puja. Como en todo juego de construcción de ciudades obtendrás puntos al final de la partida en función de los terrenos presentes en tu ciudad. Las casillas de vivienda te darán un punto cada una, pero sólo las del barrio más grande.
Años han estado preguntándome: "Betote, ¿te gusta "Brass"?"; y yo siempre que ni idea, que no lo había probado ni ganas, pero por qué, porque es mirar ese tablero y darme toda la pereza, que madre mía qué cosa más fea, que no es feo, es elegante, elegante es un chimpancé con esmoquin, "Brass" es feo, y mira que en estas al final me acabaron liando para jugar una partida.
Hoy os traemos un combate muy especial que involucra muerte, destrucción y muñequitos monos. Estamos ante el mundo de un extraño Pokemon europeo que está creado en Francia, donde decidieron que ya tocaba coger las lecciones aprendidas de Japón y hacer muñecos cabezones, molones, con nombres chulis,...
Vamos a ver un unboxing rapidito, a ver qué lleva dentro. Tenemos una fichita de troquel con las banderitas de victoria y la corona. Seremos príncipe y princesa que queremos luchar por la herencia de nuestro padre, el rey; y debemos luchar uno contra el otro para conseguirlo. Aquí véis, tenemos a la princesa, los diferentes guerreros que nos van a acompañar,...
Desde el submarino habrá que ir adentrándose en las profundidades del mar. Lo primero será descontar el oxigeno, éste será según el número de tesoros que hayamos cogido. Seguidamente se tiran los dados al resultado se le restará el número de tesoros cogidos y éste será los movimientos que se puedan hacer. Hay cuatro niveles de tesoros, más abundante cuanto más profundo está.
Hola, buenas. Aquí estamos en D.a.Dos, y hoy os traemos un juego de estrategia, un puzzle abstracto, que nos va a meter directamente en la jungla. Así que hoy tenemos un juego en el que tendremos unos símbolos y tenemos que reproducir unos patrones. Cada uno tiene cuatro patrones que tiene que representar en el tablero moviendo las fichas.
Ya estamos aquí con este prototipo; y sí, me habéis escuchado bien, es un prototipo. Hay ciertas cosas que cambiarán con respecto al juego final, pero es bastante fiel. Saldrá muy prontito en campaña de mecenazgo, así que estaos atentos. Aquí tenéis la preparación para una partida, para el modo de partida de aprendizaje.
Hola, buenas. Aquí estamos en D.a.Dos. Hoy os traemos un juego super divertido. No os dejéis engañar por la ilustración, es de niños, pero no sólo de niños. Hasta que no vi esos animales de madera, ni se me había ocurrido jugarlo, la verdad. Es un juego muy, muy divertido. Super chulo. Es un juego de nenes... y no.
Si jugabas a juegos de mesa alemanes entre mediados de los 90 y principios de los 2000, había un nombre que conocías sí o sí: Reiner Knizia. El maestro de los temas pegados, las mayorías curiosas y los métodos raros de puntuación, que más tarde decidiría que para qué esforzarse si la pastaca estaba en hacer variaciones de "Piko Piko" para el móvil.
Hoy vamos de isla a isla, porque os traemos un juegazo cooperativo que he tenido ganas de traer porque es de los más sencillitos que con muy pocos componentes consigue un montón de experiencia de juego. ¿Qué significa la cooperación en un juego de tablero? Que tienes que cooperar con el resto de jugadores, tenéis que ayudaros.
Un juego de cartas, no falto de estrategia. Todos los jugadores dispondrán de los mismos animales con propiedades diversas según su especie. El objetivo es que entren en el bar, no que se lleven una patada que los echen a la calle. Se dispondrán animales por turnos hasta tener cinco entre la entrada del bar y el callejón. Los jugadores podrán elegir el animal entre los cuatro que tiene en mano.
¿A qué jugamos hoy? Pues hoy traemos a un invitado que inevitablemente tenía que aparecer tarde o temprano en estas cámaras, y es el señor Lovecraft, que es un recurrente en el mundo de los jugones, frikis y roleros de toda la vida porque, por algún motivo u otro, este escritor no es muy conocido fuera de los círculos del terror, del miedo, del misterio,...
Hola, buenas. Aquí, desde D.a.Dos, venimos a hablaros de un juego para dos exclusivamente. Un juego en el cual nos vamos a enfretar al oponente, con nuestro maestro y sus discípulos y vamos a ver qué contiene dentro. Un formato de caja bastante curioso. La verdad es que es muy destacable lo cuidada que está la caja.
Mi historia con los videojuegos es intermitente. Siempre he sido mucho más de Nintendo que de PC, eso sí; pero ha habido títulos puntuales que me han tenido enganchado durante una buena temporada. "Doom", en su simplicidad, era un gran liberador de estrés: ¿que el día había estado regular? Pues nada, media horita matando demonios con una motosierra y suavecito como un bebé recién bañado.
En el día de hoy vamos a traer una cosa muy, muy especial porque es más conocido últimamente que la Biblia... Estamos hablando de la superlicencia que ha conseguido conquistar a miles y miles de fans, gente que conocía el mundo fantástico... gente que no... que ha leído las novelas... da igual.